El sector de la automoción mundial continuará con una recuperación lenta y accidentada, que intensificará la competencia, acelerará los ajustes requeridos por los desafíos estructurales y, en última instancia, mantendrá bajo presión las métricas financieras de la mayoría de las empresas, en particular minoristas, mayoristas y proveedores.
De hecho, el mercado automotriz está en camino de una caída notable (~ 17% en 2020), según la última información de Euler Hermes, uno de nuestros accionistas, y no se espera el regreso a los niveles anteriores a la crisis antes de 2023, a pesar del despegue de los vehículos eléctricos. Las medidas de confinamiento en todo el mundo por el brote de COVID-19 llevaron a una restricción masiva de la movilidad y al cierre de concesionarios de automóviles, salas de exposición, ferias de automóviles, agencias de registro y fábricas, lo que empujó a los mercados automotrices a caídas sin precedentes. La flexibilización de las medidas de confinamiento ha contribuido a una mejora, pero la reanudación gradual de la demanda de automóviles seguirá siendo desigual en los mercados y dependerá en gran medida de la magnitud de las nuevas medidas de confinamiento.
Oportunidades para el sector de la automoción
- Intensificar el apetito de los consumidores por vehículos de combustible alternativo y nuevos servicios de movilidad.
- Diversidad de necesidades locales (es decir, coches urbanos en China, camionetas en Tailandia).
- Fundamentos de los mercados emergentes (clase media en crecimiento, tasa de equipamiento baja), que respaldan las perspectivas del mercado a medio plazo.
- Demanda de modelos premium y vehículos deportivos utilitarios (SUV) más grandes, lo que respalda la rentabilidad de los fabricantes de automóviles.
- Experiencia de actores establecidos en temas de diferenciación (es decir, diseño), producción y cadena de suministro.
Desafíos para el sector de la automoción
- Dependencia de las ventas de automóviles nuevos de medidas públicas (subsidios, exenciones fiscales), políticas monetarias (costo de endeudamiento), precios del petróleo (costos de funcionamiento) y precios en el mercado de segunda mano.
- La intensificación de los requisitos medioambientales (contaminación, emisiones de CO2) requiere grandes inversiones y conduce a precios de los coches más elevados.
- Propuesta de valor de los vehículos eléctricos a corto plazo, debido al costo de la batería, la autonomía y la expansión de la red de carga.
- La madurez del mercado en las economías avanzadas, y un menor interés entre la generación más joven en las grandes ciudades, conduce a una fuerte competencia (precio e innovación).
- Competencia de gigantes tecnológicos y startups en el campo de las tecnologías de conducción autónoma y conectada.
Algunas tendencias a observar en la industria automovilística
- El regreso a la normalidad en las ventas de vehículos ligeros después del brote de COVID19 en los principales mercados (China, EE.UU., Europa) junto con las medidas políticas tomadas para respaldar la demanda.
- Competencia de precios del mercado de segunda mano.
- Rápida disminución de vehículos diésel.
- Impulso del despliegue de los vehículos eléctricos, especialmente en Europa y China, y cambios en el entorno regulatorio, en particular los subsidios públicos para los vehículos eléctricos y la prohibición de los motores de combustión interna (ICE).
- Fabricantes de automóviles y estrategias de la cadena de suministro en respuesta a la caída histórica en las ventas y las interrupciones relacionadas con Covid-19.
- Posibles amenazas de aranceles.
- Innovación en conducción autónoma y nuevos servicios de movilidad, impulsando el gasto en I + D, inversiones, fusiones y adquisiciones y asociaciones.
Papel de los principales actores de la industria automovilística
Fuente: Euler Hermes