La función de Compliance en la empresa hace referencia a las políticas y buenas prácticas para determinar, clasificar y prevenir riesgos, tanto legales como operativos. Es una figura prioritaria para la alta dirección, que no ha parado de tomar fuerza desde su introducción, y que ayuda a la empresa a protegerse frente a posibles responsabilidades penales y a minimizar el riesgo reputacional.
El éxito de las políticas de Compliance en la empresa dependerá de las actuaciones de cada uno de sus miembros. Incluso va más allá, y se extiende a proveedores y clientes. Por eso, el establecimiento de programas regulares de comunicación y formación permite que todos aquellos que son parte de la organización sean conscientes de los riesgos que afrontan en su actividad y actúen conforme a la legalidad y la ética.
La creación de una cultura de cumplimiento es un uno de los pilares para incrementar el conocimiento de leyes, regulaciones, estándares, procedimientos y demás asuntos relacionados con el Compliance, y para asegurar su cumplimiento.
En este artículo te damos algunas pistas sobre cómo hacer que los miembros de la organización vivan el Compliance.
Embajadores de la función de Compliance en la empresa
Una buena manera de impulsar la función de Cumplimiento en las compañías es el nombramiento de embajadores que fomenten el conocimiento de las normativas y de las vías de comunicación de posibles contingencias o dudas.
En Solunion, hemos establecido 12 compromisos de debido cumplimiento, recogidos en nuestro Código Ético y de Conducta, a los que hemos asociado 12 impulsores por país. La misión de estos impulsores, que son empleados de la compañía, es compartir con todos los compromisos que hemos asumido y resolver las dudas que puedan surgir.
Campañas de comunicación: la gamificación como generador de conciencia
Como hemos comentado, la comunicación es una palanca para la generación de cultura en torno al Compliance en la empresa. La creación de un plan de comunicación para dar a conocer los compromisos y despertar conciencia resulta primordial.
Este plan de comunicación deberá informar y reiterar mensajes para hacer que calen en todos los miembros de la organización. Además de comunicados recurrentes y formaciones, el uso de campañas concretas en las que entre en juego la gamificación es una buena forma de que los colaboradores interioricen los conocimientos y los vivan.
Ejemplo de ello es nuestra campaña Expedición Impulso, que, mediante un juego interactivo por etapas, ha servido para reforzar los conocimientos sobre los compromisos de nuestro Código Ético y de Conducta.
Nuestros Solunioners, divididos por equipos, han tenido que contestar a las preguntas de cada etapa para ayudar a Saúl (un personaje inventado) en su aventura por construir un futuro más ético. Los premios entregados a los ganadores se han relacionado con Objetivos de Desarrollo Sostenible del Pacto Mundial de Naciones Unidas, del cual formamos parte: fruta orgánica de proveedores locales, objetivos de oficina realizados con materiales ecológicos…
El Compliance es una función totalmente transversal que afecta a todas las áreas de la compañía. Por eso, deberás encontrar la forma de que tus equipos lo interioricen, de modo que la ética y la legalidad sean los ejes de todas sus acciones. Un buen plan de comunicación, articulado en torno a embajadores y campañas en las que la gamificación sea protagonista, es una forma eficaz de llegar a tus colaboradores.
