Cuando una empresa aprovecha una oportunidad única, todo cambia. En este caso, hablamos de una empresa de cimentación que consigue participar en la construcción de la mayor factoría de baterías eléctricas en España, con una inversión de varios miles de millones de euros. Un reto técnico y financiero que marcará un antes y un después.
El contrato es enorme, la oportunidad única. Pero surge la pregunta inevitable: ¿Cómo afrontar una operación de este tamaño sin poner en riesgo la liquidez? ¿Cómo mejorar el circulante y garantizar el cobro?
El desafío financiero
Para ejecutar las obras, la empresa necesita recursos inmediatos. Aunque las facturas se emitirán, los plazos de cobro son largos y el circulante se convierte en un problema. La solución habitual es acudir al banco para vender esas facturas mediante factoring. Pero aquí aparece otro obstáculo: ¿qué entidad financiera comprará esas facturas sin garantías?
La herramienta que cambia la perspectiva
Aquí entra en juego la póliza UNO de Solunion, una solución diseñada para cubrir un único riesgo con un único cliente. Pensada para operaciones estratégicas, esta póliza ofrece la tranquilidad necesaria para dar el paso sin comprometer la estabilidad financiera.
En este caso, el tomador es la empresa de cimentación y el beneficiario es el banco. ¿Qué significa esto? Que la entidad financiera compra las facturas con total confianza, porque la operación está asegurada, y la empresa consigue la financiación necesaria para emprender su negocio.
¿Cómo funciona la póliza UNO en la práctica?
La póliza UNO ofrece:
- Cobertura hasta el 90% frente a insolvencias de hecho y de derecho.
- Duración máxima de 12 meses, ideal para contratos puntuales.
- Prima única, sin ajustes posteriores.
- Servicio de recobro incluido.
- Aplicable a operaciones nacionales e internacionales, se adapta a la realidad del negocio.
Gracias a esta cobertura, la empresa firma el contrato con confianza. El riesgo deja de ser un freno para obtener financiación y se convierte en una oportunidad para expandirse. Lo que parecía una decisión arriesgada se transforma en el inicio de una etapa de crecimiento.
Más allá de la cobertura: un impulso comercial
La póliza UNO no solo protege frente al impago. También aporta un valor estratégico: permite asumir proyectos que antes parecían imposibles, facilita la negociación con entidades financieras y refuerza la imagen de la empresa ante sus socios. En definitiva, convierte la incertidumbre en seguridad y la seguridad en crecimiento.
Para muchas compañías, esta póliza ha sido el factor que les permitió dar el salto internacional, cerrar contratos de alto volumen o consolidar relaciones con nuevos clientes. Porque cuando el riesgo está controlado, las decisiones se toman con confianza.
