¿Qué es el flujo de caja? Definición y consejos

La mala gestión de la tesorería ha sido la perdición de muchas empresas, por lo que no puede dejarse al azar. Un suministro regular de efectivo es vital para cualquier organización, para que pueda pagar los salarios y las facturas, así como invertir en el crecimiento. Por ello, la gestión del flujo de caja es esencial para conocer a fondo de dónde procede el dinero y proyectar los ingresos futuros para garantizar el crecimiento de la empresa.

En este artículo respondemos a las preguntas más frecuentes relacionadas con la gestión de la tesorería de la pequeña empresa: ¿qué es el flujo de caja? ¿Cuáles son los beneficios de una correcta gestión de la tesorería?  ¿Qué hacer para una mejor gestión del flujo de caja?

 

¿Qué es el flujo de caja?

Empecemos por darle una definición a la gestión de la tesorería: es el proceso de seguimiento y optimización del flujo de caja en un periodo de tiempo determinado. Más concretamente, significa analizar el dinero que recibes -generado a través de las ventas, por ejemplo- en comparación con el dinero que gastas al pagar facturas, salarios, impuestos, etc.

El flujo de caja es diferente del beneficio, que es la suma de dinero que queda una vez deducidos todos los costes asociados a la producción y entrega de un producto o servicio.

Cuando la diferencia entre las entradas y salidas de efectivo de tu empresa es negativa al final de un periodo determinado, significa que el efectivo de tu empresa es menor que el saldo que tenías al principio de ese periodo.

El objetivo de la gestión de la tesorería es evitarlo controlando y optimizando el flujo de caja, y asegurándose de que las entradas de efectivo (ingresos de efectivo) sean siempre superiores a las salidas de efectivo (gastos de efectivo). El superávit puede, por ejemplo, ayudarte a invertir y a crecer, pero una buena gestión de la tesorería de la pequeña empresa tiene muchas otras ventajas.

Ventajas de la gestión de la tesorería

A continuación, te ofrecemos un listado de los siete principales beneficios de la gestión del flujo de caja:

  1. Pagar a tus empleados a tiempo

Tu equipo te ayuda a mantener el negocio en funcionamiento, por lo que pagarles a tiempo es esencial. Es un elemento básico para retener su lealtad y atraer talentos. Gracias a una sólida gestión de la tesorería, te aseguras reservar efectivo para sus salarios.

  1. Comprar lo que necesitas para crear tu producto o prestar tu servicio

Otro de los múltiples beneficios de la gestión de la tesorería es que te permite tener una previsión clara de tus cuentas por pagar, lo que posibilita el gasto en las materias primas o los servicios que necesitas para cumplir con tus pedidos. Un posible excedente también podría ayudarte a ampliar tu línea de productos.

  1. Pagar todos los demás gastos

Ya se trate de impuestos, de la devolución de un préstamo o de otras facturas, una buena gestión de la tesorería te permitirá hacer un seguimiento de todos tus gastos pasados, actuales y futuros, para que puedas planificar en consecuencia y asegurarte de que estos gastos se pagarán a tiempo.

  1. Planificar y coordinar la actividad de la empresa para maximizar los beneficios

La planificación es esencial para cualquier negocio. Una de las ventajas de la gestión de la tesorería es que te ayuda a planificar, analizar el rendimiento y obtener el máximo beneficio de tu actividad. También te permitirá preparar los presupuestos financieros de los próximos años.

  1. Mantener las reservas de efectivo y evitar los gastos excesivos

Sin una buena gestión de tesorería, podrías gastar más de la cuenta o utilizar el efectivo necesario para fines que no revierten. El análisis del estado de flujo de caja puede ayudarte a determinar si la situación financiera de tu empresa es estable. Así, ganarás en control, vigilarás tus gastos, determinarás tu liquidez y rentabilidad, y te asegurarás de que tengas suficientes reservas de efectivo en caso de gastos inesperados o deudas incobrables.

  1. Ampliar o hacer crecer tu negocio

Otro beneficio de la gestión del flujo de caja es permitir que tu negocio se abra a inversiones y oportunidades de crecimiento. Gracias al análisis del estado de la tesorería, podrá identificar la relación entre ingresos y gastos, y a tomar decisiones presupuestarias. Por ejemplo, si tienes un excedente, puedes decidir desarrollar nuevos productos o servicios, expandirte a un nuevo mercado, etc.

  1. Conseguir un préstamo para la empresa

Muchas empresas dependen de los bancos u otras instituciones financieras para financiar algunas de sus actividades. En caso de déficit de tesorería, puedes pedir un préstamo que te permita superar la situación. Antes de concederte el préstamo, los bancos estudian la situación financiera de tu empresa y tu capacidad para devolver el importe. Gracias a la gestión de tesorería, podrás utilizar tus estados de flujo de caja como prueba y proporcionar todos los detalles relativos a tus entradas y salidas de efectivo.

En resumen, una buena gestión de la tesorería de tu empresa te garantizará la tranquilidad de poder cumplir con todas las obligaciones, dirigir el negocio con mayor eficacia y concentrar esfuerzos en su crecimiento.

Infografía: 7 principales beneficios de la gestión del flujo de caja

Infografía con 7 principales ventajas de una buena gestión de la tesorería

Descarga la infografía para conocer las ventajas de una correcta gestión de tesorería

Consejos para una mejor gestión de la tesorería

Para garantizar una situación financiera positiva y evitar problemas de tesorería, te ofrecemos algunas recomendaciones:

  1. Haz previsiones de tesorería con regularidad para poder proyectar tu situación de flujo de caja -los ingresos que obtendrás (estima tu volumen de ventas, etc.) y cuánto dinero gastarás (prevé los gastos que tendrás que hacer, cuánto pedirás, etc.)- y actúa en función de las conclusiones.
  2. Investiga a fondo a los posibles nuevos clientes y analiza su solvencia obteniendo su calificación financiera, recurriendo a socios locales para obtener información o utilizando inteligencia alternativa.
  3. Gestiona las facturas atrasadas para evitar los impagos: sigue las mejores prácticas de control de crédito para agilizar los pagos facturando a los clientes lo antes posible, estableciendo condiciones de pago claras y aplicando un proceso que garantice que las facturas se pagarán a tiempo. Define qué hacer en caso de impago.
  4. Presta atención a las amenazas emergentes, como los deudores, las facturas cuantiosas y las fechas de reembolso de los préstamos.
  5. Evita gastar en exceso y asegúrate de realizar inversiones sólidas: antes de realizar una gran inversión o ampliar negocio, considera siempre el impacto que tendrá en tu tesorería e investiga los sectores o mercados para comprender plenamente el contexto.
  6. Mantén las reservas de efectivo ahorrando una proporción del flujo de caja para cubrir responsabilidades inesperadas
  7. Forma a tu equipo en los principios básicos del control del crédito (o contrata a personas que los conozcan) para una mejor gestión de la tesorería.
  8. Utiliza un programa digital de gestión que te ayude a hacer un seguimiento de las facturas y los gastos, y te proporcione una imagen clara de tu situación de tesorería.

A pesar de todo lo anterior, quizá quieras asegurarte de que tu empresa está protegida contra el riesgo de crédito contratando una póliza de seguro de Crédito. El seguro de Crédito ayuda a proteger el flujo de caja de tu empresa cubriendo sus cuentas por cobrar con vencimiento a 12 meses.

Además, te ayuda a evitar las deudas incobrables y te indemniza en caso de que se produzcan. Es una de las mejores formas de complementar la gestión de la tesorería de tu empresa.

 

¿Quieres más información sobre el seguro de Crédito y la gestión del riesgo comercial? Contacta con nosotros.

¿Por qué son importantes las reservas de liquidez en una empresa?

La reserva de liquidez te protege frente a problemas a corto plazo, como una caída de las ventas o un gasto inesperado, y te permite aprovechar las oportunidades que se presenten. Este artículo responde a la pregunta «¿Qué es la reserva de efectivo?» y comparte consejos sobre cómo constituir y gestionar la tuya.

Índice de contenidos

¿Qué son las reservas de liquidez en una empresa?

Las reservas de liquidez son los activos líquidos que tu empresa tiene a mano para cubrir las necesidades de financiación a corto plazo y de emergencia. También puede denominarse reserva de tesorería. El efectivo es lo más líquido, por supuesto, pero las inversiones estables a corto plazo que no es probable que pierdan valor, como los fondos del mercado monetario, también pueden ser reservas de efectivo para la empresa, ya que le permiten acceder rápidamente dinero.

¿Por qué se necesita una reserva de liquidez?

Una buena reserva de liquidez te garantiza que no te quedarás sin dinero. Además, una reserva de tesorería es útil en varios escenarios:

  • Para disponer de dinero si se necesita de inmediato para una compra importante.
  • Para hacer frente a pagos imprevistos.
  • Para pagar los impuestos.
  • Para cubrir periodos de vacas flacas: por ejemplo, si tus clientes tardan en pagarte o si tu negocio es estacional.

Además, las reservas de efectivo para empresas pueden ayudar a:

  • Impulsar futuros planes de exportación o expansión: una reserva de tesorería significa que dispones de la liquidez necesaria para respaldar tus planes.
  • Financiar inversiones líquidas para complementar tu reserva de liquidez, ya que estas inversiones pueden generar mayores rendimientos que dejar el efectivo en el banco.
  • Evitar opciones con tipos de interés elevados, como tarjetas de crédito o préstamos adicionales, para financiar necesidades a corto plazo.

 

En resumen, ¿qué es la reserva de liquidez? Piensa en ella como una solución a corto plazo para un problema a corto plazo, un amortiguador contra imprevistos y un fondo para aprovechar oportunidades. Los préstamos se utilizan mejor para financiar gastos más importantes y planificados, como las inversiones de capital.

Cálculo del coeficiente de reserva de tesorería

La recomendación estándar para las reservas de tesorería es mantener suficiente liquidez para cubrir entre tres y seis meses de gastos operativos. Reservar demasiado poco significa que corres el riesgo de quedarte sin liquidez, mientras que acumular demasiado efectivo puede ser perjudicial para el negocio en el futuro, ya que el dinero puede emplearse mejor en otra cosa.

Empieza por examinar tus ingresos y gastos, así como el estado de la tesorería de todo el año. Este análisis también te proporcionará información sobre la gestión de tu tesorería. En este artículo te enseñamos a realizar proyecciones de tesorería.

La fórmula del coeficiente de reserva de tesorería

Resta los gastos totales de los ingresos totales para ver la cantidad total de dinero que se destinó a los gastos de la empresa durante un periodo de tiempo determinado (lo que queda es el capital circulante). A continuación, divide esa cifra por el número de meses del periodo contable para determinar el índice mensual de consumo de liquidez o cash burn rate:

Fórmula del cas burn mensual: ingresos menos gastos entre el número de meses

  • Cash burn mensual = Ingresos totales – Gastos totales / Número de meses del período contable 

Para obtener la cantidad de liquidez que necesita tu empresa, multiplica esa cifra por el número de meses que quieres que cubra tu reserva de liquidez:

Fórmula de la reserva de tesorería necesaria

  • Cash burn mensual x Número de meses de cobertura necesarios = Reserva de tesorería necesaria

 

Ten en cuenta que las nuevas empresas que aún no disponen de estados financieros pueden utilizar la previsión de tesorería y el presupuesto de la empresa para establecer el importe de la reserva de liquidez.

Crear reservas de liquidez para la empresa

Constituir una reserva de tesorería es crucial para el éxito de una empresa. Te proporcionamos algunas ideas:

  • Controla tu flujo de caja. Cuando entre dinero, reserva un poco. No gastes más de la cuenta en los meses de vacas flacas. En este artículo te mostramos los beneficios de contar con un flujo de caja sano y te ofrecemos algunos consejos.
  • Intenta destinar una cierta cantidad cada mes al ahorro para aumentar tu reserva de liquidez.
  • Considera, además del efectivo, inversiones seguras y sólidas que generen rendimientos superiores a los que pagan las cuentas corrientes o de ahorro.
  • Vende tus existencias antiguas al por mayor para generar efectivo y reduce tus niveles mínimos de existencias encargándolas solo cuando las necesites.

 

Salvaguardar tu tesorería es fundamental. Recuerda que tu empresa corre peligro cuando los clientes tardan en pagar o no lo hacen.  Considera la posibilidad de contratar un seguro de Crédito comercial para cubrir los retrasos e impagos que puedan afectar al flujo de caja u obligar a tu empresa a utilizar su reserva de liquidez. Además, esta solución puede respaldar tus planes de expansión. Para obtener más información, visita tu sitio web local.